TYWIN
Salió
de la posada con gesto tranquilo, terminando de comerse una manzana mientras
contemplaba la Fortaleza Roja, la cual se observaba perfectamente desde el
lugar en el que se encontraba.
«Construida sobre la colina de Aegon, la más
alta de todo Desembarco», pensaba con cierta fascinación. Tiró los restos
de la manzana y se secó el sudor de la frente. Aquel calor era más húmedo e
insoportable que el de las Tierras de Occidente. «Debe ser por la cantidad de personas que viven aquí».
–
Hermano, ¿por qué no te has presentado en el torneo? –Le preguntó Kevan una vez
localizaron el lugar idóneo para observar las justas.
–
Prefiero luchar en combates cuerpo a cuerpo, con la espada… Lo cierto es que
este tipo de torneos me aburren.
–
¿Entonces por qué te ofreciste a venir conmigo?
–
Porque a ti sí te gustan –contestó con seriedad–, y porque quería apartarme de
nuestro padre.
–
¿De padre? –Preguntó Kevan confundido.
–
Sí. No dejo de pensar en sus frecuentes salidas y en todo el dinero que está
derrochando. Creo que necesitaba alejarme de esas preocupaciones, aunque la
capital no es precisamente el lugar más apropiado para ello –Tywin suspiró
levemente–. De todas formas siento que no estoy haciendo bien al marcharme y
dejar de lado mis obligaciones.
–
Mas esas son las obligaciones de padre, no las tuyas.
–
Exacto, por eso mismo no me gusta estar aquí. No sé cómo va a afrontar todos
los problemas que se le puedan presentar.
Kevan
abrió la boca para volver a hablar, pero en ese momento vio como algunas
banderas Lannister se acercaban a ellos: – Ya vienen.
–
Sí –corroboró Tywin al reconocer el rostro de algunos de sus primos, todos
ellos hijos de los hermanos menores de su padre.
–
Sentimos la tardanza –dijo uno de ellos.
–
Llegáis justo a tiempo, aún no han empezado las justas –exclamó Kevan con
ilusión.
Tywin
se mantuvo en su lugar mientras sus primos y demás familiares se sentaban cerca
de ellos. Solo hacía un leve movimiento de cabeza para saludarles. – ¿Dónde
está Stafford? –Preguntó finalmente al ver que el chico no se encontraba con
ellos.
–
Dijo que vendría en seguida. Quería visitar a alguien.
–
Bien.
El
muchacho volvió la vista al frente mientras sus primos charlaban animadamente
entre ellos. Observó como los participantes terminaban de colocarse las
armaduras y pudo reconocer entre ellos a Ser Barristan Selmy y a Brynden Tully,
ambos hombres muy queridos por el pueblo después de la Guerra de los Reyes
Nuevepeniques. Por supuesto también estaba el hijo primogénito del rey y varios
integrantes de la Guardia Real. Parecía que en aquel torneo no habría muchas
sorpresas.
De
hecho, la primera justa fue entre Brynden Tully y un caballero del que nunca
había oído hablar. Como era evidente, Tully venció sin complicaciones su primer
asalto. «Esto va a ser muy tedioso»,
pensó para sí mismo.
El
rey Aegon V en cambio parecía disfrutar del torneo, pues la sonrisa no se
borraba de su rostro, al igual que su nieta Rhaella. El príncipe Jaehaerys en
cambio se mostraba serio, mientras que Aerys parecía molesto, mirando a ambos
lados como si buscara a alguien entre el público. «Qué extraño».
–
Ya hemos llegado.
La
voz de Stafford interrumpió sus pensamientos, olvidándose por un momento de la
familia real para encargarse de la suya propia. Lo que no esperaba era
encontrarse con una nueva sorpresa en ese instante, ya que al girarse vio que
su primo no venía solo.
–
Buenos días, mis señores –saludó aquella chica con educación, haciendo incluso
una reverencia perfecta cuando reparó en la presencia de Tywin.
«Sabe quién soy», pensó el chico,
confundido y sorprendido a la vez, aunque luchaba por mantenerse tan serio y
regio como de costumbre. Finalmente inclinó la cabeza como respuesta a aquella
reverencia, provocando que la joven sonriera. Una sonrisa dulce y perfecta. Le
parecía una chica hermosa, realmente guapa y quizás algo inocente, aspecto que
la realzaba aún más. Pero había algo que aún no comprendía: sentía que debería
conocer a esa muchacha, pero, por más
que pensaba, no la reconocía.
«Tiene el cabello y los ojos de los
Lannister, aunque sus vestimentas son las de una dama de la corte… ¿Qué chica
de mi familia vive en Desembarco del Rey?»
–
No nos dijiste que tu hermana también estaría con nosotros, Stafford –comentó
Kevan en ese momento.
«¿Hermana? ¿Es su hermana?»
–
No sabía si podría estar con nosotros durante el torneo. Parece que hoy los
Targaryen le han dado un respiro –explicó Stafford soltando una carcajada.
–
La princesa Rhaella siempre ha sido muy complaciente conmigo –indicó la joven–.
No les recrimines, hermano.
«Una dama de compañía de la princesa… hermana
de Stafford… Siete Infiernos, ¿cómo es posible que Kevan la recuerde y yo no?»
–
De acuerdo Joanna –dijo Stafford, algo resignado pero sonriente–. Anda,
siéntate a mi lado y disfrutemos del torneo.
«Joanna».
alskdsgahkalahafagajlakshghakajshshagfajakag
ResponderEliminarNunca un comentario había dicho tanto xD
Eliminarahhhhhhhhhh! MY GOD!!!! * baila la conga* ¡¡Me ha encantado!! Ese último Joanna...kajsdkahdskahdkhas!!!!!
ResponderEliminarEse último Joanna es un impacto directo en los ovarios xD
EliminarEso ha sido a traición, para dejarnos sin ovarios por los siglos ya.
EliminarAAAAAAAAHHHHHHHHHH, se han reencontrado, se han reencontrado, yo también digo ahsgfadsgahsgfdñmnñsdafads, ¡qué guapo el final! un simple Joanna puede decir mil cosas, estoy nerviosa y hasta me rio como si la vaina fuera conmigo, jajajaja, uffff. Necesito más.
ResponderEliminarAh! y el Aerys ese es un chungo, no me extraña que Jaime lo matara (esto no es spoiler ¿no?) jajaja. Eres increíble, chavala, increíble.
Esperando el próximo con MUCHAS ganas.
Cristina xDDD
PD: Muchas gracias.
Exacto, como bien dices ese último Joanna puede significar muchas cosas. Creo que he conseguido el efecto que quería en vosotras al leer eso ;)
EliminarJajajaja, no, eso no es spoiler xD Y sí, a mí tampoco me extraña que le matara, pero como ya te dije en el anterior capítulo, ahora está más "sosegado" XD
PD: A mí no tienes que agradecerme nada, boba :)
Por fin! Ya era hora! Mira que no recordarla jajaja xD
ResponderEliminarMi padre todo enfurruñado el pobre, lo que provocas en el Tywin!
Me ha gustado mucho ^^ sigue así
Pues menos mal que todavía no conoce a Tywin, para ese entonces sí que se volverá loco... de celos xD
EliminarMuchas gracias por comentar :D
ya!! joder como me dejas asi!!!! me esta encantando! sigue escribiendo bonita, quiero sexo!! jajaj
ResponderEliminarJajajajajajajaja, aquí hay muchos que queréis ver ya a Tywin y Joanna procreando xDD
EliminarCuando subes estoy ansiosa me gusta mucho gracias
ResponderEliminarMuchas gracias y perdón por la espera, he tenido algunas complicaciones ^^
EliminarPero acabo de subir ahora un nuevo capítulo, así que espero que lo disfrutes :D